7 errores que cometes al limpiarte la cara
No olvides que la piel de la cara es una de las zonas más delicadas y debe ser tratada con mucho cuidado. Presta atención a los cuidados que tienes y modifica aquellos hábitos que estén causando problemas.
No te lavas las manos
Algunos productos para la limpieza del rostro no están preparados para eliminar estas impurezas y si los usas en las etapas iniciales podrías estar contaminándolos.
No cambias de productos en años
De seguro tienes algún producto de belleza preferido. Quizás te encanta porque es muy fresco, huele bien y es suave. Sin embargo, el mundo a nuestro alrededor no se mantiene igual y va cambiando conforme el clima.
Por eso debes ajustar tu rutina de cuidados.
No cuidas la exfoliación
Muy rara vez necesitarás exfoliar el rostro todos los días, ya que esto puede hacer que se reseque la piel. Algunos exfoliantes podrían dañarla, porque contienen químicos que son muy agresivos y, por lo general, suele ser suficiente con lavar la cara diario. Lo ideal es que la exfoliación se haga una vez por semana o dos veces al mes, en función del producto utilizado. De esta forma evitarás perder la suavidad de tu piel y le darás el uso apropiado al exfoliante.
Eres muy poco cuidadosa con tu piel
¿Eres de las que secan muy fuerte luego de lavarte la cara? Analiza si tallas demasiado tu piel, jalando con la toalla. Si piensas que cuanto más fuerte seques, mejor se limpia la piel, estás equivocada. De hecho, podrías estar ocasionando un gran daño. Trata de hacer todo siempre con movimientos circulares y suaves: limpiar, exfoliar y secar. Eso reduce el daño y es más efectivo para lograr una limpieza en condiciones.
Al terminar, seca con ligeros golpecitos y usa una toalla suave. No te excedas y trátala con cuidado.
No aplicas correctamente el limpiador
Debes aplicarte correctamente el producto limpiador. Los poros son los que lo absorberán para llevarlo a las capas profundas de tu piel. Por eso debes aplicarlo con movimientos circulares, muy ligeros y suaves. Si lo haces de manera horizontal o vertical puede que te demores un poco más.Revisa y sigue las instrucciones del limpiador: verás que, aunque puede tratarse de un proceso lento, trae muchos beneficios.
No usas agua con la temperatura adecuada
Lo más recomendable es utilizar agua tibia, ya que no te provocará ningún daño y eliminará correctamente las impurezas. Además, es mucho más agradable la sensación de agua tibia.
No enjuagas bien
Con la limpieza no termina tu rutina de belleza. Es donde inicia ya que, con el rostro limpio, puedes aplicar los tónicos, humectantes, sueros y protector para mantener el rostro sano. Luego de haber utilizado todos estos productos en tu rutina debes tener presente que si no te enjuagas bien, se comienzan a acumular sobre tu piel. Esto trae como consecuencia poros obstruidos y provoca piel seca y aparición de barritos.
Fuente: mejorconsalud.com